Cuando leemos los textos del evangelio, y pensamos en la manera como Jesús suscitó y acrecentó la fe de sus coetáneos, no podemos dejar de pensar en él como un Maestro de la fe. María Magdalena, en el contexto de la resurrección, lo llama Rabunni, que...
More
Cuando leemos los textos del evangelio, y pensamos en la manera como Jesús suscitó y acrecentó la fe de sus coetáneos, no podemos dejar de pensar en él como un Maestro de la fe. María Magdalena, en el contexto de la resurrección, lo llama Rabunni, que quiere decir maestro. (Cf. Juan 20, 11-18) Ella, lo llama maestro porque de él ha recibido no un contenido doctrinal vacío, sino sobre todo una experiencia de amor que transformó su corazón por el contacto y la cercanía con Jesús mismo, más que con sus enseñanzas. Evidentemente hay un contenido, pues los relatos del evangelio nos comentan cómo Jesús llamó a sus discípulos para que estuvieran con él (CF. Mc 3,13-14), y estando con él, escuchaban con frecuencia su mensaje y la nueva forma de comprender la relación con Dios y con los hombres. (Cf. Mt 5, 1ss). Él comprendió a plenitud que un verdadero maestro es el que sustenta con su vida las palabras que dice. Él, como hombre, supo asumir la consecuencia de sus palabras y mostró que ser mae
Less