Una buena noche de luna llena, la selva estaba
oscura y solo se veía la luz de la luna.
El Mono Tono no podía dormir daba vueltas y
vueltas en su rama y decidió irse a dar un buen baño
y en el lago vio algo que le encanto.
Era una tarta de nata y...
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Una buena noche de luna llena, la selva estaba
oscura y solo se veía la luz de la luna.
El Mono Tono no podía dormir daba vueltas y
vueltas en su rama y decidió irse a dar un buen baño
y en el lago vio algo que le encanto.
Era una tarta de nata y relamiéndose dijo:
-Esa tarta es para mí.
Y metiéndose al lago para comérsela pensó:
-Pero si me la como yo no se la podrá comer nadie
mas, bueno esta tarta la he visto yo y si me la como
nadie lo sabrá.
Entonces se lanzó sobre la tarta y para su sorpresa
solo se encontró con agua miró al cielo y descubrió
que la tarta era simplemente el reflejo de la luna.
Entonces decidió bañarse sin más.
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